Salinas Bahamas
Salinas Bahamas
Salinas Bahamas presenta una oportunidad sin precedentes para revertir la degradación ambiental causada por décadas de producción industrial de sal. Antes de la década de 1970, este extraordinario ecosistema prosperaba como parte del sistema natural de lagunas de Long Island. Cuando Diamond Crystal Salt Company construyó su complejo industrial, la creación de diques y terraplenes alteró drásticamente el flujo de agua en las lagunas, generando un daño ecológico generalizado que persiste décadas después de la cesación de operaciones.
Nuestra propuesta de restauración abre nuevamente el terreno a las fuerzas naturales que una vez lo definieron. La relación dinámica entre la forma del terreno y el agua constituye la esencia de nuestro enfoque de diseño. Estamos removiendo la infraestructura industrial y restableciendo los patrones naturales de flujo de agua, permitiendo que las mareas, tormentas y ciclos estacionales retomen sus funciones ecológicas esenciales a lo largo de este vasto paisaje costero.
El plan maestro equilibra la conservación con una programación de clase mundial. El desarrollo de 580 hectáreas incluye tres marinas, más de 400 lotes residenciales de 0.2 a 2 hectáreas cada uno, instalaciones de investigación, hoteles boutique, clubes de playa, centros de spa y bienestar e islas con amenidades residenciales. Estos programas están cuidadosamente posicionados para trabajar con los sistemas naturales restaurados, no en contra de ellos, creando un nuevo modelo de desarrollo de destinos sostenibles.
Salinas Bahamas busca ser la primera comunidad sostenible que integra y mejora simultáneamente su entorno, estableciendo un precedente en el desarrollo responsable de destinos basado en la ecología del sitio.
La investigación y la restauración impulsan el impacto más amplio del proyecto. Ante la intersección de las crisis de biodiversidad y cambio climático, buscamos contribuciones clave mediante modelos de captura de carbono y restauración de hábitats. La reserva natural dedicada proporciona espacio para la investigación científica y demuestra cómo la restauración ecológica a gran escala puede generar ecosistemas resilientes que beneficien tanto a la vida silvestre como a las comunidades humanas
Este proyecto establece un nuevo precedente para el desarrollo regenerativo en entornos costeros sensibles. Al dedicar más del 85% del sitio a la conservación y restauración, Salinas Bahamas demuestra que el desarrollo responsable puede ser una fuerza para la sanación ecológica, creando un modelo replicable en regiones costeras de todo el mundo.